Tal como hiciera el Madrid de hace dos temporadas, parece que empiezan, una vez alcanzada la fase decisiva de la temporada, las remontadas épicas contra equipos netamente inferiores (al menos en presupuesto y calidad teórica).
Lleva el Madrid unas jornadas ganando 1-0 y gracias a todos los rivales que se cruza. Sin juego pero con efectividad. Anoche tocaba remontada como contra el Recre o el Espanyol en la liga de Capello. Claro que ahora llega lo difícil: Sevilla, Valencia, Barça y Villarreal. Y no es lo mismo remontarles a estos que al Getafe, digo yo. Y si no que se lo digan al Liverpool.
Estas remontadas con un Higuaín pletórico (¿qué tiene que hacer para desbancar a Raúl de una vez?), tanto hoy como entonces, llevan dos años escondiendo carencias y si otra vez ganan la Liga quizás las vuelvan a ocultar (que haya elecciones da esperanzas a los madridistas que no se dejan cegar por los títulos). Y es que este Madrid del corazón y no de la cabeza, de la calidad, no debería estar a tres puntos del líder a falta de 6 jornadas, un líder que, según todo el mundo, hace el mejor fútbol del continente, un líder que está completando una temporada histórica, con más puntos que nunca, más goles que nunca, más victorias que nunca... y sólo a 3 puntos (con un partido menos).
Quizás deberíamos reflexionar sobre el nivel de "La mejor Liga del Mundo".
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