La Real Sociedad regresa a Primera tras vagar tres años en la división de plata de nuestro fútbol. Al conjunto donostiarra le ha costado volver más de lo que hubiera imaginado pero lo ha hecho después de una temporada en la que, además de reconciliarse con su afición, ha asentado las bases para poder tener una economía saneada y retomar la filosofía de cantera que parecía haber dejado de lado en los últimos años. Tres condicionantes imprescindibles para aspirar a ocupar de nuevo su sitio en la máxima categoría y tratar de evitar convertirse en equipo ‘ascensor’.
Por la capital guipuzcoana han desfilado en los últimos años -acompañados de diversas polémicas- directivas, entrenadores y fichajes de dudosa calidad que hicieron perder el norte al club donostiarra. Ahora, tres años en Segunda y una ley concursal después, la afición txuriurdin recupera la ilusión por su equipo. En las calles aún perdura la euforia tras el ascenso logrado el pasado mes de junio.
La situación económica no permite muchos derroches por lo que la cantera continuará siendo la protagonista de la plantilla. Griezzman, Zurutuza o Markel Bergara, entre otros, debutarán en Primera este año. A su lado, jugadores que ya conocen la máxima categoría como Claudio Bravo, Mikel González, el capitán Aranburu o Xabi Prieto.
La directiva se ha centrado en reforzar el ataque realista, que con Zurutuza, Prieto y Griezzman como directores de orquesta promete mucha pelea. Al equipo txuriurdin vuelve Joseba Llorente, un viejo conocido de la casa y un fichaje que ha generado mucha ilusión entre la afición. La incorporación de Raúl Tamudo ha sorprendido a muchos, mientras continúan las negociaciones por hacerse con los servicios del uruguayo Diego Ifrán. Francisco Sutil es otra de las caras nuevas de este equipo que también busca reforzar la línea defensiva: el objetivo es el central del Rosenborg, Vadim Demidov.
Entretanto, el número de socios no para de crecer y se acerca ya a la barrera de los 25.000. Las instituciones perfilan el proyecto de un Anoeta sin pistas y las banderas siguen ondeando en los balcones. Todos asumen que será una temporada difícil, pero en Donostia esperan con ansia el arranque liguero.
No hay comentarios:
Publicar un comentario