"Cuco" Ziganda ya no seguirá siendo el entrenador de Osasuna. Tanto él como su segundo, el ex-blaugrana Andoni Goikoetxea, han sido destituidos.
La aventura al frente de Osasuna ha sido hasta el momento la única en el fútbol de élite de Ziganda. Llegó al puesto desde las categorías inferiores del club tras la marcha de Aguirre al Atleti. Su llegada, con la eliminación en la previa de la Champions frente al Hamburgo no fue la deseada. Aunque el equipo nunca ha llegado a funcionar también como el que dirigió su antecesor, Ziganda ha conseguido cumplir el objetivo de la salvación las dos temporadas que ha estado al frente de los 
rojillos. En su primer año además, se sobrepuso de su eliminación prematura en Champions y llegó hasta semifinales de la UEFA donde sólo el que sería campeón, el Sevilla, pudo con él.
Esta temporada el juego del equipo estaba dejando bastante que desear y, aunque no estaba en descenso, no había conseguido ganar y sólo la solidez defensiva le habían permitido sumar 4 puntos en 4 empates. Lo que ya no sé es si era culpa suya o de que realmente no tiene un jugador que pueda hacer jugar al equipo. La cuestión es que llega José Antonio Camacho para suplirle. Lo raro es la fecha, esta semana no ha habido Liga y es de suponer que no ha pasado nada raro en este tiempo. La única opción que se me ocurre es que hasta que ya estaba decidida la destitución y simplemente estaban a la espera de tener cerrado al sustituto. Un comportamiento entendible por parte de la directiva pero bastante cruel con el entrenador. Esperemos que Camacho tenga más suerte y que Osasuna no pase los apuros del año pasado.
La aventura al frente de Osasuna ha sido hasta el momento la única en el fútbol de élite de Ziganda. Llegó al puesto desde las categorías inferiores del club tras la marcha de Aguirre al Atleti. Su llegada, con la eliminación en la previa de la Champions frente al Hamburgo no fue la deseada. Aunque el equipo nunca ha llegado a funcionar también como el que dirigió su antecesor, Ziganda ha conseguido cumplir el objetivo de la salvación las dos temporadas que ha estado al frente de los 
rojillos. En su primer año además, se sobrepuso de su eliminación prematura en Champions y llegó hasta semifinales de la UEFA donde sólo el que sería campeón, el Sevilla, pudo con él.Esta temporada el juego del equipo estaba dejando bastante que desear y, aunque no estaba en descenso, no había conseguido ganar y sólo la solidez defensiva le habían permitido sumar 4 puntos en 4 empates. Lo que ya no sé es si era culpa suya o de que realmente no tiene un jugador que pueda hacer jugar al equipo. La cuestión es que llega José Antonio Camacho para suplirle. Lo raro es la fecha, esta semana no ha habido Liga y es de suponer que no ha pasado nada raro en este tiempo. La única opción que se me ocurre es que hasta que ya estaba decidida la destitución y simplemente estaban a la espera de tener cerrado al sustituto. Un comportamiento entendible por parte de la directiva pero bastante cruel con el entrenador. Esperemos que Camacho tenga más suerte y que Osasuna no pase los apuros del año pasado.
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