Ya era de sobras conocidas la marcha de Deco esta temporada. Si alguna duda quedaba las declaraciones del propio Deco (en que sólo
él decidiría donde jugaría el año que viene) y las nada afortunadas de Guardiola e Inlga diciendo que no contaban con él para la temporada 2008-09 las despejaron totalmente y de paso pusieron muy difícil su venta.
Bueno, difícil no, desde el momento en que Deco eligió el equipo londinense como destino el Barça no tenía más opción. Si además dices que no cuentas con él pues prepárate a cobrar poco, muy poco, por mucho que Abramovich sea el dueño de los blues.
Así es como por la irrisoria cantidad de 10 millones de euros hemos vendido a uno de los mejores centrocampistas del Mundo. Si a esto le sumamos la también irrisoria cantidad de 6 millones de euros por uno de los mayores talentos de futuro del fútbol europeo, Giovani Dos Santos, podemos concluir que el Barça no sabe vender. Aún recuerdo como, tras un año discretísimo de Sonny Anderson conseguimos venderlo al Olimpique de Lyon por 3000 millones de las antiguas pesetas... ¡qué tiempos aquellos!
La marcha de Deco es, definitivamente, el primer paso que había quedar para que aquel equipo que nos maravilló hace dos años, pasara a la memoria barcelonista y dejara de ser un esperanzador presente tras un glorioso pasado. Ahora toca mirar al futuro con Guardiola y sus chicos.
él decidiría donde jugaría el año que viene) y las nada afortunadas de Guardiola e Inlga diciendo que no contaban con él para la temporada 2008-09 las despejaron totalmente y de paso pusieron muy difícil su venta.Bueno, difícil no, desde el momento en que Deco eligió el equipo londinense como destino el Barça no tenía más opción. Si además dices que no cuentas con él pues prepárate a cobrar poco, muy poco, por mucho que Abramovich sea el dueño de los blues.
Así es como por la irrisoria cantidad de 10 millones de euros hemos vendido a uno de los mejores centrocampistas del Mundo. Si a esto le sumamos la también irrisoria cantidad de 6 millones de euros por uno de los mayores talentos de futuro del fútbol europeo, Giovani Dos Santos, podemos concluir que el Barça no sabe vender. Aún recuerdo como, tras un año discretísimo de Sonny Anderson conseguimos venderlo al Olimpique de Lyon por 3000 millones de las antiguas pesetas... ¡qué tiempos aquellos!
La marcha de Deco es, definitivamente, el primer paso que había quedar para que aquel equipo que nos maravilló hace dos años, pasara a la memoria barcelonista y dejara de ser un esperanzador presente tras un glorioso pasado. Ahora toca mirar al futuro con Guardiola y sus chicos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario