El RCD Mallorca, ¿a la UEFA?

Los representantes de nuestra Liga Nacional de Fútbol han decidido unificar los horarios para esta última jornada liguera en los partidos en los que todavía se tienen que decidir plazas: una de UEFA y otra de descenso. Porque, aunque ya para la mayoría de nosotros ya se ha decidido lo que más nos importa – quién gana la liga y quién entra en Champions League – este fin de semana muchos equipos se juegan su futuro. En algunos casos al todo o nada.
El domingo a las nueve, la mayoría de mallorquines, estamos a la espera de que el Real Club Deportivo Mallorca, después de tantos años, entre de nuevo en una plaza en competición europea. Siendo realistas, la cosa está complicada: tiene que perder el Racing de Santander y que el Mallorca gane a un RCD Zaragoza, que se juega el descenso, en el frío campo de Son Moix. Difícil pero no imposible.

Y lo peor es que algunos como el abajofirmante, tiene más de un dilema respecto a que el club bermellón entre en la Copa de la UEFA. El primero y más romántico es que si efectivamente la carambola rebota para favorecer al equipo de Gregorio Manzano, un equipo se verá perjudicado por encima del resto: el RCD Zaragoza, que después de una inversión millonaria, y fichajes que cualquier plantilla de primera los quisiera tener, puede verse la temporada que viene en el infierno de segunda. Sin duda sería una lástima para el fútbol español, un equipo que juega bien, que ataca, que no se esconde y con jugadores que hacen un fútbol vistoso: Milito, Oliveira, Aimar, Sergio García… Si finalmente el equipo maño baja, será un duro palo para su afición, tan ilusionada después de ver los fichajes que la directiva ha hecho este verano. Fichajes tan inverosímiles como el de Fabián Ayala y tan ilusionantes como el de Pablito Aimar.

El segundo dilema que me hace dudar de si lo mejor para el Mallorca es ocupar o no esa golosa plaza de UEFA, es un tema más responsable y de futuro. El hecho de que el club balear no es un equipo solvente es ya un secreto a voces, en la prensa local llevan apareciendo semanas atrás noticias poco esperanzadoras para el club. Su dueño, el señor Grande, ha sido alertado por la posición económica del club y las deudas del mismo. La solución a este problema es claro, y en eso el RCD Mallorca es un experto: vender a los mejores jugadores de la plantilla para solventar la economía. Dani Güiza, actual pichichi de la liga y con ofertas en la premier league y seguido muy de cerca por el Valencia CF; Arango, con ofertas desde hace varias temporadas y que finalmente esta puede ser su última temporada en la isla; el portero Moyá, que según cuentan desde la capital ya lo tiene todo hecho para ser el nuevo portero del Atlético de Madrid; Fernando Navarro, con buenas ofertas en la liga española y que el Mallorca puede sacar tajada gracias a su posible y probable convocatoria en la selección Española para la Eurocopa. Éstas son las más que probables bajas del equipo para el año que viene y salvo alguna operación de última hora, los que el club sacrifique para solventar la difícil economía del conjunto mallorquín. También podemos hablar de Nunes, seguido el pasado verano por el Oporto, oferta que no se llegó a concretar; y el del extremo Jonás, jugador que ha dicho abiertamente que prefiere mejorar económicamente en algún otro equipo.

Es por ello que, en un equipo donde posiblemente exista una limpieza de sus mejores jugadores y se rellene, probablemente, de jugadores jóvenes pescados en Sudamérica – muchos salen bien y otros no tanto – me parece contraproducente y temerario que aparte de la liga, también tengan que pelear en batallas europeas. Muchos equipos en la situación del Mallorca acabaron metiéndose en Europa, y no les fue demasiado bien en la Liga. Recuerdo, por ejemplo, el Celta de Vigo: todavía disputando partidos en Segunda, después de bajar la misma temporada que lograron jugar en la máxima competición europea.